The Shape of Water es una de las cintas más bellas y aclamadas por la crítica en años recientes. Su maestría en dirección, escritura y cinematografía le dieron a su autor, el cineasta mexicano Guillermo del Toro, dos merecidos premios Oscar por Mejor película y por Mejor director, pero ahora toca turno de hablar del hombre anfibio protagonista de la cinta.
Del Toro siempre se ha destacado por ser un fiel creyente de los monstruos y la fantasía, un género que no se había destacado en las premiaciones de la Academia de artes y ciencias cinematográficas desde El Señor de los Anillos: El retorno del rey. ¿Cómo lograr posicionar un género tan poco aceptado por los miembros de dicho gremio en la industria del cine? Bueno, hace años, en entrevista, Del Toro me dijo:
“Sé lo más original que puedas y nunca dejes que alguien te quiera joder tus historias. Cuando yo comienzo una nueva historia lo hago a partir de una idea ó una imagen que surge en mi extraña y enfermiza cabeza, lo importante es desarrollarla con la misma pasión y fuerza que tienes al imaginarla. La idea es siempre construir la historia con un montón de detalles, esperando que la gente no los note hasta una segunda revisión. Así sabrás que tu trabajo vale la pena para todos, cree en tu trabajo y en la gente que te rodea”.
Cuando Guillermo del Tor menciona “creer en la gente que te rodea”, lo dice en serio. Prueba de ello es su larga trayectoria trabajando con Doug Jones, actor que ha dado vida a las fantásticas y monstruosas creaciones en la obra del director: desde 1997 Jones y Guillermo han trabajado juntos, comenzando con su cinta Mimic, película que representó la incursión del mexicano en la industria de Hollywood, pasando por Abe Sapien (un anfibio, curiosamente) en las dos entregas de Hellboy y finalmente dándole vida al “hombre anfibio” de The Shape of Water.
Antes de ser Hombre anfibio.
Uno de los trabajos más destacados de Jones fue El laberinto del Fauno, cinta de 2006 que le dio a Guillermo del Toro varias nominaciones en los Oscars. En esta cinta, que por cierto puso en el radar a Alejandro Gónzalez Iñárritu, Alfonso Cuarón y al mismo Guillermo (conocidos como “Los tres amigos”), Jones dio vida a dos de los personajes más importantes del filme: el fauno mismo y al “Hombre pálido”. Desde entonces, su carrera no volvería a ser la misma.
Hoy Guillermo del Toro (@RealGDT) demostrará que los geeks también pueden ganar en los #Oscars. Con 13 nominaciones, el cineasta compite por la estatuilla a Mejor Director… y sabemos que sus criaturas lo respaldan.https://t.co/FjiUduGsIJ pic.twitter.com/3BKEqISplJ
— SMASH (@SMASHem_mx) March 4, 2018
Más recientemente Doug Jones dio “vida” a uno de los vampiros de la serie The Strain, un show de ciencia ficción que Del Toro escribió y dirigió junto a Chuck Hogan. La historia se centraba en un mundo apocalíptico en el que un virus transformaba a los hombres en seres nocturnos de aspecto similar a los vamapiros. El actor creyó haber terminado con el género de fantasía cuando Guillermo del ofreció interpretar un fantasma en la cinta La cumbre escarlata. Al terminar este proyecto, el intérprete volvería a poseer branquias:
“Platicando con Guillermo del Toro, le pregunté: ¿Quieres que vuelva a ser un hombre anfibio? Él me respondió: Sí, pero esta vez es diferente. Dougie, tú eres el protagonista de una película romántica”. Yo me considero un actor y busco en cada personaje su cuerpo, alma, sus necesidades, lo que lo mueve, sus miedos, todas esas cosas. Dejo que eso motive el movimiento y las expresiones que hago”.
Tan sólo intentar descifrar cómo funciona la mente de Guillermo del Toro es un reto que pocos se atreverían a tomar. Desde una aventura de fantasía en plena guerra civil española hasta kaijus invadiendo el mundo, uno en el que fantasmas y criaturas mágicas pueden existir, el imaginario del cineasta tapatío nunca nos ha defraudado al proyectar sus más profundos sueños y fantasías en la pantalla grande. Las creaciones de Del Toro siempre están en constante cambio, pero nunca perdiendo aquello que les hace especiales: los sueños, provocados por un trauma de la vida, con Doug Jones como protagonista de estos sentimientos.
