‘La hija del pantano’: la película de suspenso que trata el síndrome de Estocolmo

Este 14 de diciembre llega a la pantalla grande ‘La hija del pantano’, del director Neil Burger.

La hija del pantano, película basada en la premiada novela de suspenso psicológico de Kareen Dionne, nos presenta a Helena (Daisy Ridley), una niña que vive en el bosque con sus padres. Su papá le enseña cómo leer las huellas de los animales o cómo pensar como uno de ellos para poder cazarlo. Cada lección superada le hace “ganar” una marca/tatuaje, el cual queda tallado en la piel de Helena para que no olvide.

Su papá guarda un oscuro secreto: secuestró a la mamá de Helena hace 12 años y la joven es producto del abuso cometido. Un día, Helena y su madre logran escapar de su casa y llegaa a la policía. Cuando crece, se da cuenta de que vivió una mentira y el hombre que ella admiraba en realidad es un monstruo.

A lo largo de la cinta nos damos cuenta de que Helena manifiesta algunos síntomas del llamado Síndrome de Estocolmo, ¿pero a qué nos referimos con esto?

• Estos son los estrenos de cine en Cinépolis y Cinemex del 14 de diciembre

¿Qué es el síndrome de Estocolmo?

Se refiere a un fenómeno psicológico en el cual una víctima de un secuestro, retención u otra situación amenazante para su vida, desarrolla sentimientos de apego, simpatía o incluso afecto hacia sus captores.

Este síndrome ha sido objeto de estudio en psicología y psiquiatría, y su comprensión ha evolucionado con el tiempo. Se le nombró por primera vez en 1973, después de un incidente ocurrido en Estocolmo, Suecia. Algunas de sus características comunes incluyen:

• Desarrollo de vínculos emocionales: La víctima puede sentir empatía y apego hacia sus captores, a veces defendiéndolos o justificando sus acciones.
• Identificación con el agresor: La persona secuestrada puede empezar a ver el mundo desde la perspectiva de sus captores. Esto la lleva a adoptar sus mismas creencias y valores.
• Miedo a ser herido: La víctima puede experimentar miedo intenso a ser lastimada o incluso asesinada si no cumple con las expectativas de sus captores.
• Negación de la realidad: La persona secuestrada puede negar o minimizar la gravedad de la situación, a veces llegando a defender a sus captores.

El síndrome de Estocolmo se ha observado en diversos contextos, como secuestros, situaciones de rehenes, abusos domésticos y relaciones abusivas. Los expertos creen que esto se manifiesta como una estrategia inconsciente de supervivencia, donde la víctima trata de adaptarse emocionalmente a la situación para aumentar sus posibilidades de supervivencia.

Es importante señalar que el síndrome de Estocolmo no se desarrolla en todas las situaciones de secuestro o retención, y su presencia puede depender de varios factores, como la duración del tiempo de cautiverio, la naturaleza de la relación entre la víctima y el captor, y las características psicológicas de la persona afectada.

Diamond Films

En el caso de la película, un miembro de la familia nuclear es el captor, pero el síndrome de Estocolmo suele presentarse, la mayoría de las veces, con una persona desconocida; en esta película, dado que es un familiar, el vínculo se intensifica y es mucho mayor el desafío de romperlo.

Este 14 de diciembre llega a la pantalla grande la historia de Helena en La hija del pantano. Averigua qué decisión tomará y cuál será su futuro y el de su familia.