Explora algunas curiosidades que han convertido a El Grinch en una parte importante de las celebraciones navideñas en la pantalla grande.
Hay una película navideña que se destaca como un clásico moderno al fusionar la magia de la temporada con la inimitable energía del comediante Jim Carrey. Hablo de El Grinch, dirigida por Ron Howard y estrenada un 17 de noviembre de 2000, una adaptación cinematográfica del querido cuento del Dr. Seuss, que narra la historia de un ser gruñón de pelaje verde que busca robar la Navidad a los habitantes de un pueblo llamado Whoville.
Sin embargo, más allá de la trama, la película se destaca por la asombrosa transformación de Carrey para encarnar al cascarrabias Grinch, y los innovadores efectos visuales que transportan a los espectadores a un mundo festivo.
En este texto, exploraremos algunas curiosidades de la producción, las memorables actuaciones, y el impacto duradero que ha convertido a El Grinch en una parte importante de las celebraciones navideñas en la pantalla grande.
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“Una pesadilla de terapia”
Jim Carrey pasó por un proceso de maquillaje intensivo para transformarse en el Grinch. La aplicación del maquillaje tomó varias horas, y el actor incluso llamó a la experiencia “una pesadilla de terapia”.
Traje incómodo
El traje del Grinch también fue una tarea desafiante para Jim Carrey. Estaba hecho de látex y mohair, y pesaba alrededor de 23 kilos. Carrey tuvo que usar lentes de contacto amarillos para modificar los ojos del Grinch, los cuales le causaron severas molestias.
Efectos visuales innovadores
La película fue pionera en el uso de tecnología CGI (imágenes generadas por computadora) para crear el peludo aspecto del Grinch. Los efectos fueron revolucionarios en ese momento, y la película recibió elogios por la calidad de su animación.
Escenografía impresionante
El pueblo de Whoville fue construido en un enorme set en la cima de una montaña. La atención al detalle en la creación de este mundo mágico es evidente en cada escena. Captura a la perfección el ambiente decembrino, el clima gélido y la magia de una época como la Navidad.
Maestro de la improvisación
Jim Carrey es conocido por su habilidad para la improvisación, y el director Ron Howard permitió que el histrión aportara su creatividad al personaje. Muchas de las escenas más cómicas fueron resultado de la improvisación de Carrey al momento de la filmación.
Canciones memorables
La banda sonora de la película incluye canciones memorables, como “You’re a Mean One, Mr. Grinch”. Este tema fue interpretado por el actor Thurl Ravenscroft en la versión original de 1966 y fue recreada por Jim Carrey para la película del 2000.