¿Qué hace Mancini para que la música de La pantera rosa se nos quede clavada en el cerebro y, a la vez, retrate perfectamente lo que estamos viendo?
Cuando un ejecutivo del estudio de cine Paramount sugirió, en 1961, eliminar de la película Desayuno con diamantes la escena en la que Audrey Hepburn canta sola “Moon River”, se dice que la actriz, en un lenguaje más o menos colorido según la versión, exclamó: “Por encima de mi cadáver”.
“Moon River” era una pieza creada para el filme por el letrista Johnny Mercer y el compositor Henry Mancini. Capturaba en unos minutos la esencia emocional de la protagonista del filme, una Holly Golightly chispeante pero melancólica. La banda sonora, que también compuso Mancini, equilibraba lo sofisticado y lo emotivo. “Moon River” surgió en una época en la que se había hecho popular incluir canciones dentro de las películas a causa de la presencia en la gran pantalla de estrellas de la música como Elvis o los Beatles. Hoy en día es también una canción icónica de las historias del cine y la música.
Mancini ganó dos Óscar, a mejor banda sonora y mejor canción original (junto a Mercer), por Desayuno con diamantes y este trabajo supuso su punto de partida en el reconocimiento de la industria del cine.
Ahora, que se cumplen cien años de su nacimiento, merece la pena analizar a un compositor de referencia en el desarrollo de la música para imagen.
Uniendo el pasado y el futuro
Mancini es aclamado por reinventar las tendencias de la época, ya que fusiona el estilo del jazz y el pop en la música del cine. Es, por tanto, un nexo entre la era de las big bands y el pop. Su trabajo comienza ya en la década de los 50 y se extiende hasta poco antes de su muerte en 1994.
El final de la década de los 50 y principios de los 60 fueron vitales, ya que creó música instrumental memorable, como por ejemplo la de la serie Peter Gunn, la de La pantera rosa o el tema “Baby Elephant Walk”, de la película Hatari!.
Uno de los rasgos distintivos de Mancini fue la diferenciación de las orquestaciones del cine de décadas anteriores. Tanto en Peter Gunn como en “Baby Elephant Walk” la instrumentación es más escasa que lo que se venía haciendo hasta entonces. Esto enlazaba a la perfección con los gustos de la juventud de la época.
Décadas siguientes: madurez y experimentación
A lo largo de la década de los 60 y 70 Mancini explora terrenos nuevos. Por ejemplo, en la película Sola en la oscuridad Mancini emplea dos pianos con afinaciones microtonales, creando una atmósfera de gran interés, alejándose totalmente de los géneros del jazz y el pop.
Algo similar ocurre en El visitante nocturno, en donde la música refleja la atmósfera opresiva de la película.
En la década de los 80, Mancini explora distintos terrenos, es un compositor maduro. En este contexto gana su cuarto Óscar a la mejor canción original: “Le Jazz Hot”, que interpreta Julie Andrews en la película musical ¿Victor o Victoria?.
Ya avanzando los años 80, las demandas del mercado de la industria cinematográfica cambian con respecto a los compositores, a los géneros y a los estilos demandados. Tal es así, que, por ejemplo, en la película Lifeforce, Mancini crea una música ambiciosa y densamente orquestada. Sin embargo, ésta no aparece en las secciones de la película para las que Mancini la había planificado, quedando dispersa o incluso eliminada en algunas ocasiones.
La pantera rosa: un robo, una joya y un torpe inspector
La película La pantera rosa se estrena en 1963. Un año después surge la serie de animación por la que todos recordamos su música.
La pantera rosa siempre se mete en problemas. Con su aspecto y su forma de caminar, el personaje se convierte en un icono de humor visual. A la vez, el inspector Clouseau es un torpe e incompetente policía francés que, paradójicamente, resuelve casos por casualidad o suerte.
Mientras tanto ¿qué hace Mancini para que la música de La pantera rosa se nos quede clavada en el cerebro y, a la vez, retrate perfectamente lo que estamos viendo?
La melodía
Por un lado, la melodía contiene un patrón rítmico apuntillado que aparece a lo largo de toda la pieza. Este ritmo se caracteriza por asignar a unas notas un valor más grande que a otras, dando como resultado una sucesión continua de notas largas y breves. Por otro lado, utiliza los semitonos al comienzo de la pieza, lo que se llama “cromatismo”, que provoca un gran efecto expresivo.
Además, alguna nota se vincula a la nota blues o blue note. El blues es un estilo musical que tiene su origen en los esclavos afroamericanos. Este estilo pasó a denominar una escala que, dado su contexto, se empleaba para expresar nostalgia y consuelo. No obstante, con el nacimiento del rock and roll y otros estilos, esta escala, con su nota distintiva (la blue note), se comenzó a utilizar para transmitir también otros sentimientos, como frescura y alegría.
Utilizar dos escalas para componer (la escala menor armónica de mi, que resuelve en la blue note proveniente de la segunda escala empleada: escala blues de mi menor), junto con el ritmo apuntillado, aporta originalidad y distinción a la estructura, lo cual hace que esa melodía sea más atractiva y pegadiza.
La armonía
En relación a lo anteriormente comentado, la blue note está también presente en la armonía. El acorde utilizado contiene esa nota, por lo que Mancini refuerza la sonoridad blues. Emplea también este recurso en Peter Gunn, siendo, por tanto, típico del compositor.
Además, hace uso de otro recurso muy frecuente en el jazz, que se materializa con el acorde de fa séptima. Este recurso de emplear un acorde de séptima que está a semitono de la tónica (de mi a fa hay medio tono, en vez de un tono completo) se denomina acorde sustituto tritonal y sirve para crear tensión. Como decimos, es típico del jazz y la música moderna.
Por tanto, la confluencia de estos elementos hace que esta música suene próxima a esos géneros.
El timbre (saxo)
Aunque no es el único instrumento empleado a lo largo de toda la pieza, Mancini decide usar el saxofón para interpretar la melodía principal. Este es un instrumento versátil, empleado en contextos nostálgicos, románticos o dramáticos.
Sin embargo, aquí se usa buscando otra emoción muy característica: el humor y el desenfado. No es el único que lo hace en su época. El saxo se utilizó con frecuencia en contextos humorísticos, como ocurría en “Yakety Sax” de Boots Randolph, del mismo año del estreno de La pantera rosa.
En los finales de frase y semifrase de la melodía de La pantera rosa, el saxo suele hacer un portamento a la nota grave, es decir, un deslizamiento de la nota final, lo cual aporta un cierre original.
La repetición y la simplicidad
Ambos elementos son clave para que una melodía sea pegadiza. La repetición es evidente, con una forma reexpositiva, y la simplicidad debe ir de la mano de lo original. El tema melódico principal es cantable y sencillo de recordar, pero a la vez es original y tiene elementos estructurales que se escapan de lo excesivamente simple, como los anteriormente mencionados.
Legado e influencia
Por todo lo expuesto, el legado de Mancini es indiscutible. Fue un pionero musical, ya que mezcló estilos que provocaban el interés de la época. Fue innovador y supo adaptarse a los nuevos tiempos, lo cual coincidió con la revolución en la industria de la grabación y la inclusión del estéreo. Sus contribuciones fueron significativas e influyó notablemente en compositores y arreglistas de la época, como Quincy Jones o Lalo Schifrin.
Por último, su evolución fue más que evidente, llevándolo incluso a explorar el formato del musical: comenzó la adaptación de la película ¿Victor o Victoria?, aunque no la pudo concluir por su fallecimiento a los 70 años el 14 de junio del 1994.
Manuel Tizón Díaz, Associate professor, UNIR – Universidad Internacional de La Rioja
Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.