GTO – Great Teacher Onizuka es, sin lugar a dudas, uno de los principales referentes de su género y de su época. Tōru Fujisawa lo publicó originalmente entre 1997 y 2002 y ha sido lo bastante exitosa como para haber tenido ya varias adaptaciones. En esta ocasión, hablaremos un poco sobre la versión animada de esta historia.
No pasó mucho tiempo desde su lanzamiento cuando se decidió que GTO sería adaptado como anime, pero no fue sino hasta 1999 que el primer episodio (o la primera “lección”, como se le llamó a cada episodio siguiendo el estilo del manga) se emitió.
Fue un arranque fuerte, con un episodio especial de una hora de duración que además fue engalanado con la canción Driver’s High, de la legendaria banda L’Arc-en-Ciel. Éste comprende la totalidad del primer arco, en el que Onizuka se enrola como profesor practicante y luego ayuda a Nanako Mizuki a arreglar los problemas de su familia.
Una de las principales virtudes del anime (que pueden apreciarse desde ese primer episodio) es su fidelidad al manga. Como en toda adaptación, se pueden apreciar algunos cambios menores en la manera en que se presentan los acontecimientos, pero, en términos generales, respeta la secuencia que Fujisawa dio a las aventuras de sus personajes en el manga original.
¿Por qué ver GTO?
Ver un anime como GTO en esta época puede resultar una experiencia peculiar. La estética y estilo de narración distan mucho de ser lo que el público actual está acostumbrado a ver y eso puede convertirse en un primer obstáculo para cualquiera que desee entrar a esta historia por primera vez.
Sin embargo, una vez superado el prejuicio, lo que se descubre es, en realidad, una historia fresca como pocas, que sabe retratar a través de sus personajes experiencias comunes que aún no han sido enterradas por nuestra época: bullying, amor no correspondido, esperanza y traición, anhelo y frustración; es como si en el limitado contexto de una escuela secundaria la totalidad de la sociedad pudiera encontrarse.
Pero ante todo, GTO es una comedia en el sentido más puro del género. No es un humor burdo o situacional. Construye su humor en torno a situaciones que serían gravísimas en la realidad, pero sabiendo cómo presentarlos de forma descarnada, si bien a veces cursi, y, sobre todo, sumamente honesta. Se puede no estar de acuerdo con el profundo machismo y sexismo que representa, pero una lectura más profunda muestra que en realidad se trata de satirizar a una sociedad que ha perdido el rumbo. Onizuka es el héroe improbable que rompe todas las reglas buscando lo correcto, lo justo.
La serie cuenta con la dirección de Noriyuki Abe, quien es reconocido por trabajos como Yū Yū Hakusho, Bleach y Arslan Senki. El estudio Pierrot estuvo a cargo de la animación. En total alcanza 43 episodios y está disponible en su totalidad mediante la plataforma de Crunchyroll.
¡Sigue a Crunchyroll en sus redes sociales para que estés al tanto de los últimos lanzamientos de anime!