Batman, detrás del traje y sus increíbles dispositivos, sigue siendo un simple mortal. Sin ningún súper poder, detiene a villanos y salva a inocentes. Hasta que un día, no reúne la suficiente fuerza para evitar que una niña se ahogue.

Desesperado para que eso nunca vuelva a suceder, Batman comienza a tomar el súper esteroide Veneno para superar sus limitaciones humanas. No obstante, la súper fuerza llega con un precio, y todo lo que era el Caballero Oscuro –desde su apariencia hasta su sentido de la moralidad–, pronto será deformado por su adicción. ¿Y qué bien pueden hacer los súper poderes si el alma está en juego?

Batman: Venom por Dennis O’Neil, Trevor Von Eeden, Russell Braun y José Luis García-López detallan la primera aparición de Veneno, la droga que resurgiría posteriormente en la épica historia Batman: Knightfall, como el combustible que habilita a Bane para quebrarle la columna a Batman.